Navegaba por un inmeso mar,
por los océanos del corazón,
el cielo gris depositó su lluvia
primero era fina
luego fue más densa.
El barco se agitaba
y yo luchaba por no caer por la borda
pero una ola me arrancó
y no vi orilla alguna.
Naufragué por anchos mares…
El amor se terminó.
¡Maldita tempestad que terminó con mi vida!

Foto de Asturias.