Condensar la monotonía y el hastío en un poema y recitarlo a orillas del Ebro… Eso es lo que hice ayer. La vida fluye como el agua y no se detiene. Sed felices y aprovechad el instante.
Condensar la monotonía y el hastío en un poema y recitarlo a orillas del Ebro… Eso es lo que hice ayer. La vida fluye como el agua y no se detiene. Sed felices y aprovechad el instante.
Estaba ensayando para el recital que hicimos ayer al lado del río Ebro. Recité con mascarilla y sin bajar la guardia en ningún momento. En la página de Facebook del blog compartiré los distintos vídeos de Poetes de l’Ebre. Menos mal que el tiempo acompañó, el viento del día anterior cesó y tuvimos un día …