Nunca dos palabras tan precisas me habían llenado de tanto significado: «No embarazada». Un suspiro de alivio sale de mi boca, que dibuja una sonrisa. La puedo ver reflejada en la luna del espejo del lavabo. Trajino por la cocina, preparo el desayuno, mientras voy tarareando una canción. ―Sí que estás contenta —me dice Jaime, …